En una operación reciente en la provincia de Alicante, España, la Guardia Civil arrestó a tres personas y confiscó 11 litros de ayahuasca, 117 plantas de cactus San Pedro y varias botellas de veneno de sapo. La intervención se realizó en dos propiedades rurales que eran utilizadas para organizar retiros espirituales que prometían “viajes astrales”. La investigación comenzó hace cinco meses tras una denuncia de un ex cliente y reveló que el negocio ofrecía paquetes de tres a cinco días con alojamiento y sustancias, con un costo promedio de EUR €1.000, y que recibía principalmente a visitantes europeos.

Durante la redada, 16 personas se encontraban en uno de los retiros. La Guardia Civil destacó que el centro carecía del equipo necesario para tratar intoxicaciones y que los preparados eran elaborados en un laboratorio casero, rudimentario y sin medidas de higiene. Entre las sustancias confiscadas además de la ayahuasca y el cactus San Pedro, figuraban también veneno de sapo, ruda silvestre y mimosa púdica, todas consideradas prohibidas en España debido a sus riesgos para la salud.

Los paquetes ofrecidos incluían grupos de hasta 20 personas, acompañadas en sus “viajes astrales” por seis empleados del grupo. Se cree que la organización facturó cientos de miles de euros en el último año, principalmente en efectivo no declarado, manejando múltiples cuentas bancarias en diferentes países. Además de los líderes arrestados, otros cinco guías espirituales están siendo investigados por presuntos delitos de tráfico de drogas, blanqueo de capitales y pertenencia a organización criminal.

La Guardia Civil recordó que aunque las sustancias como la ayahuasca y el veneno de sapo son de origen natural, sus efectos pueden ser altamente peligrosos y difíciles de predecir. El riesgo aumenta cuando estas sustancias son administradas por personas sin formación sanitaria, especialmente si son preparadas de modo casero. Esta advertencia es parte del contexto legal en España, donde dichas sustancias están prohibidas para consumo recreativo o sin control médico adecuado.

La escena en el lugar fue descrita como una gran sala con colchones, cubetas y pañuelos, acondicionada para los “viajes astrales”. Además de las plantas y pociones, también se incautaron 945 tabletas de Ritalin y otros productos vegetales que fueron enviados a laboratorio para análisis. Hasta ahora no se ha informado de daños físicos a los participantes, aunque las autoridades subrayan los peligros inherentes al consumo sin supervisión profesional.

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