Hungría prohíbe la entrada de adolescentes a la exposición World Press Photo debido a contenido LGBTQI+

El gobierno populista de derecha de Hungría prohibió esta semana a personas menores de 18 años visitar la exposición World Press Photo de este año, que se realiza en Budapest. La decisión se produce después de que el gobierno considerara que ciertas fotografías de la exposición violaban la controvertida ley del país que restringe el contenido LGBTQI+ para menores de edad. La prestigiosa exposición, que se celebra en el Museo Nacional de Budapest, atrae a más de 4 millones de visitantes al año y tiene como objetivo proporcionar una plataforma para el fotoperiodismo excepcional, y que cubre una amplia gama de eventos importantes.
La controversia surgió cuando cinco fotografías de la fotoperiodista filipina Hannah Reyes Morales fueron objeto de escrutinio por parte de una legisladora húngara de extrema derecha. La legisladora presentó una denuncia ante el Ministerio de Cultura del país, alegando que las fotografías violaban la ley húngara que prohíbe la exhibición de contenido LGBTQI+ a menores. En consecuencia, incluso con el consentimiento de los padres, los menores de 18 años ahora no pueden visitar la exposición. Las fotografías de Morales documentan una comunidad LGBTQI+ de personas mayores en Filipinas, mostrando sus vínculos compartidos y su cuidado mutuo mientras navegan por el envejecimiento. Algunos de los miembros de la comunidad están representados vestidos de mujer y maquillados.
Joumana El Zein Khoury, directora ejecutiva de World Press Photo, expresó su preocupación por la censura selectiva de una serie de fotografías que promueve la inclusión y la positividad. Señaló que este era el primer caso en el que una exposición enfrentaba tal censura en Europa. “La restricción del acceso a un público específico es profundamente preocupante”, subrayó Khoury, sobre todo teniendo en cuenta que ocurre en Europa.
Esta medida para prohibir la entrada a los jóvenes a la exposición es el último esfuerzo del gobierno de Hungría, encabezado por el Primer Ministro Viktor Orbán, para limitar la disponibilidad de materiales que representan o promueven la homosexualidad entre menores en diversos medios de comunicación. Si bien el gobierno afirma que la ley de “protección infantil” tiene como objetivo proteger a los niños de lo que percibe como “propaganda sexual”, ha enfrentado desafíos legales de 15 países de la Unión Europea, y la presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, la denunció como una “desgracia”. Dora Duro, la legisladora de extrema derecha que presentó la denuncia contra las fotografías, defendió la decisión del gobierno afirmando que la exposición era “perjudicial” tanto para menores como para adultos. Rechazó las afirmaciones de que la prohibición infringía la libertad de prensa o la libre expresión, argumentando que la influencia de lo que la sociedad considera normal y valioso en los niños debería ser monitoreada cuidadosamente.
Hannah Reyes Morales, la fotógrafa, dijo en un comunicado que los sujetos de sus fotografías sirven como “íconos y modelos a seguir” para la comunidad LGBTQI+ en Filipinas, y que “no son peligrosos ni dañinos”. Agregó: “Lo perjudicial es limitar la visibilidad de la comunidad LGBTQIA+ y su derecho a existir y a ser vista”, escribió Reyes Morales. “Me entristece mucho que su historia no llegue a las personas que más la necesitan, me entristece que su historia se mantenga en la sombra”.
Despues de leer, ¿qué te pareció?