La Cámara de Representantes de Florida aprobó el jueves una ley que prohibiría ciertas discusiones sobre la identidad de género y la orientación sexual en las escuelas. La Cámara de Florida aprobó el jueves el proyecto de ley de Derechos de los Padres en la Educación, conocido por sus críticos como No Digas Gay, en una votación de 69 a favor versus 47 en contra. Ahora pasará al Senado, donde ya se está debatiendo una legislación similar. La Cámara de Florida también aprobó el jueves la Ley Stop WOKE, que eliminaría de las escuelas públicas las lecciones sobre identidad de género y raza que puedan hacer sentir a los alumnos “incómodos”.

El gobernador de Florida, el republicano Ron DeSantis, ha señalado su apoyo al proyecto de ley, pero no ha indicado si lo firmará si llega a su mesa. En caso de que el proyecto se convierta en ley, los educadores de Florida tendrían prohibido hablar a los estudiantes de primaria sobre ciertos temas LGBTQI+ que no se consideran “apropiados para la edad o el desarrollo de los estudiantes”. Además, los padres también tendrían más autoridad para emprender acciones legales contra los distritos escolares al respecto.

Los grupos en favor de los derechos LGBTQI+ condenaron inmediatamente la aprobación del proyecto de ley en la Cámara, calificándolo como una pieza de “legislación extrema” que busca borrar a las personas LGBTQI+ y su historia de las aulas. “A pesar de la abrumadora indignación pública, de los datos de las encuestas que subrayan la inmensa impopularidad entre los votantes y de las horas de testimonio de las familias LGBTQI+, los legisladores republicanos votaron a favor de la aprobación del proyecto de ley No Digas Gay (…) en la Cámara de Florida. Si se convierten en ley, estos proyectos de ley tendrán un impacto desastroso en las aulas y los lugares de trabajo”, dijo el grupo de defensa LGBTQ+ Equality Florida en una declaración inmediatamente después de la votación. “Convertirán a Florida en un estado de vigilancia y darán al gobierno una amplia licencia para censurar las conversaciones sobre la historia de Estados Unidos, los orígenes del racismo y la injusticia, y la existencia de las personas LGBTQI+”.

Amit Paley, director general del grupo de prevención de suicidios de jóvenes LGBTQI+ e intervención en crisis The Trevor Project, dijo el jueves que los legisladores de Florida deberían centrarse más en el apoyo a los estudiantes LGBTQI+ y sus familias en lugar de “enfrentar a los padres contra los maestros y borrar a la comunidad LGBTQI+ de la educación pública”. “Cuando los legisladores tratan los temas LGBTQI+ como un tabú y tachan a nuestra comunidad como no apta para el aula, sólo se añade al estigma y la discriminación existentes, lo que pone a los jóvenes LGBTQI+ en mayor riesgo de intimidación, depresión y suicidio”, dijo.

A principios de esta semana, la cámara retiró una enmienda que habría exigido a los directores de los centros escolares que informaran a los padres de un alumno de su orientación sexual en un plazo de seis semanas tras conocer que no eran heterosexuales. El patrocinador del proyecto de ley, el representante estatal republicano Joe Harding, había dicho en un comunicado que “la exageración y la tergiversación en la información sobre la enmienda era una distracción; lo único que hacía la enmienda era crear procedimientos sobre cómo, cuándo y cuánto tiempo se retenía la información a los padres para que hubiera un proceso claro y los niños supieran qué esperar”. “Nada en la enmienda se refería a la exclusión de un estudiante. En lugar de luchar contra la desinformación relacionada con la enmienda, decidí centrarme en el proyecto de ley principal que faculta a los padres a participar en la vida de sus hijos”, dijo.

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