Polémica en Europa tras declaraciones de Viktor Orban: “Los húngaros no se convertirán en una raza mixta”
El primer ministro húngaro, Viktor Orban, causó indignación el sábado tras arremeter contra los países de Europa occidental por “mezclar” poblaciones europeas y no europeas en un discurso. Orban afirmó que “Occidente está dividido en dos”, argumentando que los países en los que se mezclan personas europeas y no europeas “ya no son naciones”. En el discurso, el líder conservador ultranacionalista idealizó una “raza húngara no mezclada”, durante su discurso anual en la Universidad de Verano de Tusvanyos, en Rumanía.
“Nosotros [los húngaros] no somos una raza mixta… y no queremos convertirnos en una raza mixta”, dijo, lo que provocó una enorme protesta pública. Katalin Cseh, eurodiputada del partido húngaro de oposición Momentum, criticó el discurso de Orban. “Sus declaraciones recuerdan una época que creo que a todos nos gustaría olvidar”, dijo. “Realmente muestran los verdaderos colores del régimen”, dijo. El eurodiputado rumano Alin Mituța también respondió airadamente a los comentarios de Orban. “Hablar de raza o de ‘pureza’ étnica, especialmente en una región tan mezclada como Europa central y oriental, es puramente delirante y peligroso. Y también lo es el señor Orban”, escribió en Twitter.
El líder del Fidesz predijo que la próxima década estará marcada por la incertidumbre y la guerra en el último día del evento en Rumanía, donde suele exponer los puntos de vista y la dirección de su partido para los próximos años. Este año, el político educado en Oxford optó por profundizar en sus polémicas opiniones sobre inmigración, género y geopolítica ante miles de espectadores. “Hay una guerra, una crisis energética y una inflación bélica, todo esto dibuja una pantalla ante nuestros ojos”, dijo. “Dibuja una pantalla entre nosotros y el género y la migración”.
“De hecho, el futuro plantea estas cuestiones”, continuó Orban. “Esta es la gran batalla histórica que estamos librando: sobre demografía, migración y género. Esto es precisamente lo que está en juego en la lucha izquierda-derecha”. Su discurso pasó a criticar el apoyo militar de Occidente a Ucrania, y Orban se posicionó como el principal aliado de Moscú dentro de la Unión Europea. “Si nos mantenemos al margen de la guerra, la migración, la locura de género, el impuesto mínimo global y la recesión económica, Hungría podrá mantener su éxito”, dijo.
Según el primer ministro húngaro, la guerra de Ucrania no terminará hasta 2024, después de las próximas elecciones en Estados Unidos. Sugirió que Rusia no habría invadido a su vecino si Donald Trump hubiera seguido en la Casa Blanca. La Comisión Europea ha llevado a Hungría a los tribunales por su reciente ley anti-LGBTQ+, un proyecto de ley que copia la ley “antigay” de Rusia, que prohíbe que los LGBTQ+ aparezcan en la educación o en la televisión dirigida a los menores. Las batallas de Orban contra la UE no hacen más que intensificarse, ya que la UE ha congelado miles de millones de euros en fondos de recuperación para Hungría debido a la corrupción y las infracciones del Estado de Derecho. El discurso de Orban podría indicar que Budapest ha renunciado a las esperanzas de recibir los fondos de recuperación.
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