“Mi oficio es ser puta y tengo derecho a ser puta”: La diputada trans María Clemente García desafía al Congreso de México
A mediados del año 2021, México hizo historia cuando se presentaron a elecciones legislativas más de 100 candidatos de la comunidad LGBTQI+, y se eligieron por primera vez a dos diputadas trans al Congreso. Una de ellas fue María Clemente García, licenciada en administración de empresas y estudiante de literatura, quien no ha podido ejercer profesionalmente su carrera debido a la discriminación. Si bien se desempeñó durante mucho tiempo como taxista en el servicio Didi en Ciudad de México, ahora la diputada tiene una ocupación un poco polémica que complementa a su trabajo como diputada, pues es trabajadora sexual.
En los últimos días, Clemente García — quien ahora se identifica como independiente tras salir del partido de gobierno, Morena — ha sido objeto de polémicas recientemente luego de publicar una serie de videos explícitos en su Twitter. La diputada del PAN, Teresa Castell, interpuso una queja ante el Comité de Ética debido a “las conductas violentas e inadecuadas de María Clemente”, agregando que “las mujeres no nos vamos a quedar calladas, el Comité no puede ser cómplice de esta violencia”. La queja fue apoyada por 32 diputados del PAN y PRD, y en ella dicen que “el hecho de hacer públicos actos de este calado, no hace más que menoscabar la investidura del legislador o legisladora que los comete”, y se le “falta al respeto” a la ciudadanía. Otros han pedido su dimisión.
La respuesta de María Clemente García fue muy sencilla y al punto. La diputada dijo a los medios de comunicación que se dedica a la pornografía, luego de ser cuestionada sobre sus otras actividades, además de la legislativa. “¿No te alcanza el salario de diputada?”, le preguntaron. Ella respondió de esta manera: “Me pagan por hacer pornografía… es que siempre me he dedicado a esto, los demás diputados son administradores, tienen empresas… Patricia Arizmendi, ¿por qué no renuncia al consejo de administración de sus empresas? ¿A ella tampoco le alcanza? ¿Por qué sigue trabajando? Siguen despachando en sus despachos; siguen yendo a sus ranchos los que son campesinos. ¿Yo por qué no voy a seguir trabajando? Cuando ellos dejen de producir dinero en otro lado, yo haré lo mismo”.
Además, cerró de manera contundente: “Lo siento, mi oficio es ser puta y tengo derecho a ser puta”.
La diputada también agregó que ni los videos que publica ni su oficio afectan su labor legislativa, y que se trata de un trabajo que no se realizó desde instalaciones de la Cámara de Diputados o con equipo del Congreso. También dijo que el día de hoy introducirá una iniciativa en el Congreso para que el trabajo sexual sea dignificado y respetado por la sociedad mexicana, y por ello, buscará que se legislen y regulen los derechos de quienes se dedican a este oficio y puedan acceder a servicios básicos de salud.
Cabe recordar que desde el 2014, el trabajo sexual es un trabajo protegido por la Constitución de México y no es considerado un delito o una falta administrativa. El ejercicio del trabajo sexual o prostitución, está amparado por la libertad de trabajo, siempre y cuando lo ejerzan libremente personas mayores de edad. Al considerarse un trabajo, está tutelada por el artículo 5°, que establece la libertad de los mexicanos de dedicarse al trabajo o profesión que elijan, siempre y cuando sea lícito. De esta manera, el servicio sexual se considera un trabajo, una profesión o un oficio, y a quienes los ejercen se les considera trabajadores y profesionales.
Gracias por leer nuestros informes. El periodismo independiente no se financia solo. Necesitamos de tu apoyo con una contribución, ya sea grande o pequeña para un café para nuestro crew. No importa en qué parte del mundo estés, apóyanos desde tan solo CLP 1.000 por WebPay (si estás en Chile) o un USD 1 por PayPal (si estás fuera de Chile).
Despues de leer, ¿qué te pareció?
-
Me gustó
-
Me prendió
-
1Lo amé
-
2Me deprime
-
2WTF!
-
Me confunde
