Nuevos estudios continúan demostrando los efectos positivos que pueden tener determinados tipos de drogas en la salud de las personal, bien sea a nivel físico o a nivel mental. De acuerdo con un nuevo ensayo clínico aleatorio publicado en JAMA Psychiatry, la combinación de la droga psicodélica psilocibina con la psicoterapia de apoyo da lugar a efectos antidepresivos rápidos y duraderos en los pacientes que padecen un trastorno depresivo grave.

El nuevo estudio aporta más pruebas de que la psilocibina, un compuesto que se encuentra en los llamados hongos mágicos, puede ser una herramienta útil en el tratamiento de las afecciones psiquiátricas. “Estudios previos en pacientes con cáncer y en un ensayo clínico no controlado en pacientes deprimidos con terapia asistida por psilocibina mostraron resultados prometedores. Debido a que no hubo un grupo de control, esos estudios previos fueron limitados”, dijo el autor del estudio, Alan K Davis, profesor asistente de la Universidad Estatal de Ohio y profesor asistente adjunto de la Universidad Johns Hopkins.

“Estábamos interesados en probar si la terapia asistida por psilocibina sería útil para las personas con depresión, porque la depresión es una de las condiciones más prevalentes y debilitantes del mundo”.

En el estudio, que se llevó a cabo en el Centro de Investigaciones sobre Psicodelia y Conciencia del Centro Médico Bayview de la Universidad Johns Hopkins en Baltimore, se asignó al azar a 27 personas con un historial documentado de depresión a largo plazo para que comenzaran el tratamiento inmediatamente o después de un retraso de ocho semanas.

El tratamiento consistió en 18 sesiones. Durante dos de esas sesiones, dos monitores clínicos administraron dosis de psilocibina y proporcionaron orientación y apoyo. Las dosis se administraron con un intervalo de dos semanas y cada sesión de psilocibina duró aproximadamente cinco horas, con el participante tumbado en un sofá con parasoles y auriculares que tocaban música, en presencia de los monitores. Los participantes completaron una medida de depresión y otras evaluaciones psicológicas al inscribirse, y a la semana y cuatro semanas después de completar su tratamiento. La mayoría de los participantes mostraron una disminución sustancial de sus síntomas de depresión después del tratamiento, y casi la mitad estaban en remisión de la depresión en el seguimiento. Los de este último grupo no mostraron disminuciones en sus síntomas antes de recibir el tratamiento de psilocibina.

“Después de que ambos grupos recibieron tratamiento, el 71% de los participantes tuvieron una respuesta clínicamente significativa al tratamiento (una disminución de más del 50% en las puntuaciones de depresión) a las 4 semanas posteriores a la intervención y el 54% estaban en remisión de la depresión a las 4 semanas posteriores a la intervención. Esto representa un gran efecto de este tratamiento entre las personas con trastorno depresivo mayor, un efecto aproximadamente 4 veces mayor en comparación con los estudios de los medicamentos antidepresivos”, comentó Davis a PsyPost.

Sin embargo, los participantes informaron de algunas experiencias difíciles o sensaciones durante las sesiones de psilocibina, siendo las más comunes “Me dieron ganas de llorar”, “Tristeza”, “Sufrimiento emocional y/o físico”, “Sentir que mi corazón late” y “Sentir que mi cuerpo tiembla/tiembla”. Muchos también experimentaron dolor de cabeza de leve a moderado como uno de los efectos secundarios del tratamiento.

Vale la pena destacar que uno de los participantes abandonó el estudio debido a la ansiedad causada por su primera sesión de psilocibina. Otro participante abandonó el estudio después de su primera sesión de psilocibina debido a problemas de sueño.

Davis aseguró que el tratamiento no es una suerte de cura milagrosa, dado que va de la mano con la psicoterapia debido a su carácter sustancial y que la combinación de ésta con la psilocibina es lo que hace que sea eficaz. En este sentido, resaltó que el tratamiento siempre tendrá un componente de psicoterapia, por lo que es muy probable que no sea aprobado por la FDA como un medicamento independiente.

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