Sarit Ahmed, una adolescente lesbiana de 18 años de edad, fue asesinada a tiros el pasado fin de semana tras recibir amenazas de su familia debido a su orientación sexual. La joven fue encontrada en la entrada de Yarka, un pueblo druso del norte de Israel, según la policía. Ahmed, quien era residente del pueblo de mayoría drusa de Kisra-Sumei, había recibido previamente amenazas de muerte de sus hermanos supuestamente por su orientación sexual y había permanecido en un centro de acogida durante un par de meses, según Haaretz. Por otra parte, este asesinato pone de manifiesto una vez más la importancia del mes del Orgullo este año más que nunca, cuando parece que la retórica anti-LGBTQI+ está en uno de sus niveles más altos.

En 2020, Ahmed presentó una denuncia contra dos de sus hermanos alegando que la habían amenazado de muerte, lo que les llevó a ser acusados. La acusación sugería que Ahmed “estableció contacto con alguien a quien los hermanos desaprobaban”, lo que les llevó a proferir amenazas explícitas contra su vida, según un informe del medio.

Her name was Sarit Shakour a young Druze Queer from Yarka she was murdered by family members after a long period of death threats and hate.. she where thousand times braver then me she did live openly gay I left the country before coming out this Is just so pointless and sad pic.twitter.com/Xw7x3NHLb6

— Amani (@Aurorraz_) June 10, 2023

Los hermanos fueron encarcelados durante meses, mientras que Ahmed fue internada en un centro de acogida para niñas y sometida a un proceso de reconciliación familiar supervisado por la policía y los servicios sociales. Ahmed regresó entonces al domicilio familiar, pero pronto se quejó de volver a recibir amenazas contra su vida y fue expulsada de su hogar nuevamente e ingresada en un centro de acogida como caso de alto riesgo. Ahmed abandonó entonces el centro para vivir con su hermana en otro pueblo.

El mes pasado, Ahmed presentó una última denuncia contra sus hermanos por amenazarla de muerte. Tras regresar brevemente al centro de acogida, volvió a vivir con su hermana. Fue entonces cuando se produjo su asesinato. Vale la pena destacar que las autoridades aún no han detenido a nadie por el asesinato de Ahmed y no se ha identificado públicamente a ningún sospechoso formal. El asesinato se produjo en medio de una ola de violencia no relacionada en todo Israel, incluido el asesinato de cinco personas en un presunto crimen relacionado con bandas en el pueblo de Yafia, cerca de Nazaret.

Los ciudadanos palestinos de Israel llevan mucho tiempo quejándose de la discriminación y la inacción policial contra la violencia y la delincuencia que afectan desproporcionadamente a sus comunidades. Tan solo este año han muerto 96 ciudadanos árabes de Israel en homicidios, entre ellos siete mujeres.

Share Twitter Facebook Whatsapp Copy link

Despues de leer, ¿qué te pareció?