Irán: Mujer es encarcelada por 13 años tras protestar por la muerte de su hijo en una manifestación
Una madre iraní que pedía justicia para su hijo, asesinado por agentes de seguridad, fue condenada a 13 años de prisión. Mahsa Yazdani fue declarada culpable de varios cargos que incluyen blasfemia, incitación, insulto al líder supremo y difusión de propaganda contra el régimen, dijeron grupos de derechos humanos y familiares. Durante los primeros cinco años de su sentencia de prisión, a Yazdani no se le concederá la libertad condicional.
Según el abogado de Yazdani, Meysam Mousavi, a la mujer se le impuso una condena de cinco años por “blasfemia”, cinco años adicionales por “incitación contra la seguridad nacional”, dos años por “insultar al Líder Supremo de Irán” y un año más por “difundir propaganda contra el régimen”, sumando un total de 13 años. Yazdani estaba llevando a cabo una campaña en Internet pidiendo justicia para su hijo Mohammad Javad Zahedi, de 20 años, asesinado en una protesta contra el régimen en septiembre de 2022.
Al parecer, Zahedi fue herido a tiros por las fuerzas de seguridad mientras protestaba por la muerte de la mujer kurdo-iraní Mahsa Amini, de 22 años, que había muerto bajo custodia policial tras ser detenida por violar la ley iraní obligatoria sobre el uso del velo. Zahedi murió a causa de sus heridas después de que los servicios de emergencia no pudieran tratarlo. El informe médico forense confirmó que fue asesinado por numerosos perdigones de escopeta. Después del asesinato de su hijo, Yazdani condenó públicamente al régimen y pidió justicia para su hijo y otras personas asesinadas en las manifestaciones. Posteriormente fue arrestada en agosto en su casa.
El Centro de Derechos Humanos de Irán también condenó la sentencia de prisión diciendo: “Denunciamos enérgicamente la vergonzosa sentencia de Mahsa Yazdani, una madre afligida que busca justicia para su hijo”. Agregaron: “A cientos de madres en Irán se les ha impedido buscar justicia para sus seres queridos asesinados mientras ellas mismas son perseguidas simplemente por alzar la voz”.
En los últimos meses, el régimen iraní ha estado siendo duro con los manifestantes que fueron detenidos tras las manifestaciones a favor de Mahsa Amini. El 17 de octubre, el abogado de la familia de Amini, Saleh Nikbakht, fue condenado a un año de prisión acusado de “actividades de propaganda contra el sistema”. Durante el juicio, Nikbakht fue acusado de “haber hablado con medios de comunicación locales y extranjeros sobre el caso Mahsa Amini“.
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