Martin Lüttecke presenta “Enemigos Mentales”, su colección AW2020

El diseñador chileno Martín Lüttecke ya tiene un par de años en su país no solo forjando su propia marca luego de pasar una temporada en Europa con firmas como Wales Bonner y Haider Ackerman, sino que poco a poco, está convirtiéndose en una de las figuras más importantes en la moda local y de la región gracias a lo que él mismo llama un universo retro-futurista inspirado en la juventud latinoamericana.

Hoy, pese a las adversidades de la pandemia, está de vuelta con su colección AW2020, llamada Enemigos Mentales, su tercera desde la inauguración de su marca, y en donde refleja la identidad tras su diseño y su estilo.

“Enemigos Mentales habla sobre la lucha contra el trastorno de ansiedad, la disputa contra un territorio hostil. Esta imagen se expresa en cada pieza del lookbook y campaña a través de una metáfora visual: tres mujeres perdidas en la mitad de una tormenta de nieve se enfrentan contra este enemigo invisible y violento. Esta lucha la simboliza también la cámara fotográfica; ícono de la ansiedad en la era digital, la obsesión por exhibirnos constantemente”.

En esta colección, las siluetas de Lüttecke son fuertes, pero unen a otros elementos más etéreos. “Mi visión del diseño se sintetiza en chaquetas con hombreras y cortes asimétricos; en la volatilidad de las faldas con vuelos, como si flotaran por el cuerpo, revelando las piernas en su movimiento; la irregularidad en blusas asimétricas con femeninos lazos; las botas altas en clave industrial y, nuevamente, el enterito tejido, esta vez con la espalda descubierta. Cada look aparece acompañado de un accesorio que en su estructura mezcla guantes tejidos con un cuello alto”.

Utilizando materiales como cuero vegano, pieles sintéticas, lanas naturales, jacquard cuadrillé y más, la paleta de colores va desde el azul rey el verde oliva hasta tonalidades más cálidas como el rojo y el café, que se mezclan con estampados degradados y con efectos pixelados, mientras otras piezas destacan amarillos, celestes y violetas. Para Lüttecke, esta colección es “una oportunidad para salir del encierro personal, a transgredir nuestros propios límites y a sentirse, pese a la adversidad, mucho más libres”.