En los últimos años, los hongos psilocibios se han considerado como una terapia innovadora para tratar la depresión, el LSD ha surgido como una posible nueva forma de reducir nuestra percepción del dolor y la terapia asistida por MDMA podría convertirse pronto en una forma legal de tratar el trastorno de estrés postraumático. Y ahora, parece que los científicos han empezado a ampliar el alcance de sus investigaciones, relacionando el consumo de psicodélicos con una mejor salud cardiovascular.

¿Cuál es la relación entre los psicodélicos, como los hongos mágicos, y las enfermedades cardíacas? A diferencia de las drogas como la cocaína o el alcohol, las personas que han consumido psicodélicos al menos una vez en su vida han tenido una menor incidencia de enfermedades cardíacas y diabetes, según un nuevo estudio. Es probable que los psicodélicos no tengan ninguna influencia biológica en la salud del corazón, pero el investigador Otto Simonsson, de la Universidad de Oxford, encargado del estudio, cree que los resultados se deben a que las experiencias psicodélicas suelen ir acompañadas de cambios drásticos en el estilo de vida. Estos pueden incluir la decisión espontánea de llevar una vida más sana haciendo ejercicio o dejando el alcohol y el tabaco.

Para el estudio, los investigadores analizaron los datos de más de 375.000 personas participaron en la Encuesta Nacional sobre Uso de Drogas y Salud en los Estados Unidos. Entre las preguntas que debían responder, los participantes tenían que indicar de forma anónima si habían probado alguna drogas como los hongos psicodélicos, la ayahuasca, el peyote, el San Pedro o cualquier tipo de droga psicodélica. Según los resultados, entre los que consumieron sustancias psicodélicas, el 2,3% declaró haber padecido una enfermedad cardíaca y el 3,95% dijo haber sido diagnosticado de diabetes. Por el contrario, los que nunca consumieron una droga psicodélica tenían una incidencia del 4,5% de enfermedades cardíacas y el 7,7% de ellos tenían diabetes. Las diferencias son casi el doble en ambos casos.

“En nuestra investigación anterior, hemos encontrado asociaciones entre el uso clásico de psicodélicos a lo largo de la vida y menores probabilidades de tener sobrepeso u obesidad, así como menores probabilidades de tener hipertensión en el último año, ambos factores de riesgo de enfermedades cardiometabólicas”, dijo Simonsson a PsyPost. “Por lo tanto, queríamos observar específicamente la relación entre el uso clásico de psicodélicos a lo largo de la vida y las enfermedades cardiometabólicas, como la diabetes y las enfermedades del corazón”.

La psilocibina (el ingrediente psicoactivo de los hongos mágicos) y la DMT activan los receptores de serotonina, actuando potencialmente como supresores del apetito y reduciendo los antojos. En última instancia, esto puede conducir a la pérdida de peso y a la reducción de la incidencia de la obesidad, un enorme factor de riesgo para las enfermedades cardiovasculares y la diabetes. De hecho, Simonsson menciona en el estudio que los psicodélicos pueden mejorar indirectamente las condiciones de salud mental asociadas a las enfermedades cardiometabólicas. Al reducir la ansiedad y mejorar las probabilidades de frenar la adicción, los psicodélicos pueden reducir las enfermedades cardíacas a través de un cambio de comportamiento.

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