Azealia Banks cumplió lo prometido y emprendió acciones legales contra Matty Healy después de que el cantante de The 1975 la amenazara con “abofetearla” en un post que ya fue borrado. El cantante se disculpó por el mensaje antes de insistir en que sus arrebatos en la plataforma X se produjeron durante “episodios maníacos”. Ahora, Banks compartió en la misma red  una copia de una carta de cese y desistimiento enviada por su abogado a Healy.

El documento legal exigía a Healy que cesara y desistiera de “hacer más amenazas o declaraciones difamatorias contra mi cliente” y que escribiera una “pronta disculpa pública”, además de indemnizar a Banks con USD $1.000.000. La carta decía: “Sus ataques contra la reputación profesional de mi cliente, sus epítetos racistas manifiestos y sus amenazas más recientes de violencia física contra mi cliente han quedado bien documentados desde que los publicó en Internet en todo el mundo”.

Healy no ha respondido a la carta hasta los momentos. Es más, eliminó su cuenta en X. ¿Cómo llegamos hasta acá? Pues todo empezó cuando Healy respondió a un post de Banks en X en el que decía que Charli xcx (prometida del compañero de banda de Healy, George Daniel) “solía” ser guapa. Banks compartió el vídeo musical del tema de Charli de 2014, Break The Rules, y comentó: “Charli solía ser taaaan guapa. Ugh”. Healy respondió: “Todas las mujeres a las que atacas parecen ser culturalmente relevantes, atractivas, divisivas y buenas personas. Creo que esto te pone celosa porque tienes mucho talento pero todo lo demás en ti es un fracaso. Sólo rapea, hermana”.

Luego de que Banks le dijera a Healy que tanto él como su prometida (la modelo Gabbriette Bechtel) se parecían a Frankenstein, el líder de la banda británica le respondió: “Te voy a dar una bofetada tan fuerte que voy a conseguir un récord Guinness por la mayor altura que jamás ha alcanzado esa rata que llevas por peluca”. Inmediatamente dio marcha atrás y se disculpó: “No, no puedo decir que voy a pegarle a una chica, es una locura, lo siento”.

Según la carta de cese y desistimiento, el hecho de que Healy borrara las publicaciones y las reconociera “constituye una prueba de admisión de culpabilidad”. Tras subrayar que Banks y Healy no se conocían, la carta le acusaba de actuar “intencionadamente con el propósito específico de causar conmoción, angustia y daño emocional a [Banks] con [sus] agresiones mediante amenazas de daño físico”. La carta acusaba a Healy de intimidación y acoso cibernéticos, razonando que sus palabras causaron a Banks “angustia emocional extrema”. Debido a su significativa influencia como figura pública, tiene el deber de evitar declaraciones imprudentes que ahora han suscitado una seria preocupación de que sus seguidores puedan ser invitados a actuar sobre la base de sus mensajes y “cometer un acto de violencia contra mi cliente”, continuaba la carta. También acusaba a Healy de calumnia, difamación y difamación comercial después de que se refiriera al negocio de Banks como un “fracaso”.

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